Otro día de sorpresas porque nos hemos encontrado con un glaciar muy accesible que de los muchos folletos que teníamos sólo aparecía en uno y de pasada, sin dar muchas explicaciones. Se llama "Matanuska" y tiene nada menos que 42 Km. de largo y casi 5 de ancho. Para poder pasar y acercarte tienes que pagar una entrada porque es privado, motivo por el que una vez en él puedes andar por el hielo bajo tu responsabilidad y sin que exista ningún impedimento. Esto en los Parques Nacionales en los que hemos estado no era posible si no ibas con un guía, pero aquí podías contratar uno para que te diera clases de escalada en hielo o hacerlo por tu cuenta.

Cuando salíamos por la mañana de "Talkeetna" el cielo estaba muy nuboso y por supuesto no se veía el "MacKinley". Comentábamos la importancia que tiene para nosotros que tenemos el objetivo de ver la naturaleza el que haga buen tiempo, porque los paisajes cambian notablemente en función de ello. Si hubiéramos adelantado o retrasado un día el viaje, hubiéramos visto un "Alaska" mucho más triste, pero nuestra buena suerte nos ha ayudado a estar en los principales puntos de interés en el momento oportuno.

Incluso hoy para cuando llegábamos al glaciar "Matanuska" situado en la carretera escénica "Glenn Hwy", el cielo ya se había abierto y el sol lucía con fuerza. En la entrada hemos parado para pagar la entrada y una joven se nos ha acercado hablando en español, porque se ha imaginado de donde éramos. Una murciana que está estudiando en Oregon y que se ha venido a "Alaska" para trabajar 3 meses en verano. Ya en el glaciar de "Matanuska" y aunque no llevábamos calzado adecuado ni grampones, hemos podido andar un poco por el glaciar sin arriesgarnos a un resbalón. En cualquier caso no era peligroso porque aunque se veían profundas grietas, eran muy estrechas y el hielo estaba como si fuera un granizado, sujetándote lo suficiente para andar con tranquilidad.

Hoy hemos continuado por la ruta de la "Glenn Hwy" en dirección a "Glennallen" después de dormir en el camping o RV "Grand View ", coincidiendo con un numeroso grupo de excombatientes que no especificaban de que guerra, que recorrían "Alaska" y que según rezaba en sus enormes autobuses/caravanas, estaban ¡¡¡ visitando el país que defendemos !!!.

Con un paisaje precioso, hemos avanzado uno 40 Km. parando continuamente para sacar fotografías. Montañas multicolores y flores nos acompañaban a los lados de la carretera y numerosos glaciares se podían ver no demasiado lejos.

El cielo se ha ido nublando y el paisaje ha perdido la luz necesaria para destacar, dándonos la vuelta en dirección "Anchorage". La calidad de las carreteras varía mucho de unas a otras y la mayoría están en reparaciones, obligándote a parar para hacer turno de paso porque en muchos tramos sólo hay una vía. El corto espacio de tiempo sin nieve les obliga a volcarse en los meses de verano a realizar obras en el exterior, de ahí que tengas que soportar continuos parones, en algunos casos de casi más de 20 minutos.

Cuando ya estábamos bastante cerca de "Anchorage", nos hemos desviado hacia un lugar llamado "Eagle River" del que habíamos visto una fotografía preciosa en la información que nos dieron en el "Visitor Centre" y que después ha sido un ¡¡¡ bluf !!!. Unas montañas reflejadas en un lago espejo, han sido en realidad conforme se ve en la foto de abajo, un pequeño charco que alimentaba un arroyo en el que una pequeñísima zona estaba el agua quieta, aprovechándola para sacar la fotografía y parecer un gran lago reflectante, como también los llaman aquí.

Carmen me decía, que me han pagado con la misma moneda, porque suelo retocar las fotos para mejorar la imagen y a veces puedo mostrar algo irreal. Bueno, todo tiene unos límites y yo suelo intentar mostrar lo que veo, mejorando en lo posible el tema de colores y contrastes, pero sin pretender cambiar la realidad.

Mañana nos quedaremos a visitar "Anchorage" que aunque cuando llegamos a Alaska" no nos gustó mucho, Carmen ha encontrado algunos lugares que parecen interesantes de visitar.

A pesar de que los folletos nos auguraban un bonito día viendo cosas, la realidad ha sido que no hemos visto nada atractivo, a pesar de que lo hemos intentado en diversas ocasiones. Primero ha sido el parque de "Kincaid" en donde esperábamos ver bastante fauna, pero en la entrada nos han avisado de que la hora en la que tal vez se viera algún animal sería al atardecer, por lo que la caminata que pensábamos hacer no tenía gran sentido. Los senderos normalmente transcurren dentro de bosques de pinos y sin gran atractivo, por lo que hemos intentado otra visita que teníamos prevista.

El día ha estado muy gris con nubarrones que indicaban que podía llover aunque no lo ha hecho. El siguiente destino era una profunda garganta que estaba situada en "Spencer Loop" dentro del parque "Far North Bicentennial Park". Después de llevar andando una media hora, viendo que el camino tampoco era mínimamente atractivo y la garganta que teníamos a un lado era simplemente un profundo desnivel lleno de pinos que impedían ver el fondo, nos hemos dado la vuelta. Carmen por lo menos se ha entretenido cogiendo frambuesas silvestres, y para que quede constancia que hasta en "Alaska" crece esta fruta, la he inmortalizado.

Viendo que no conseguíamos encontrar nada interesante, nos hemos acercado al zoo para ver de cerca a los osos grizzlies, ya que en "Denali" los que vimos estaban un tanto lejos. La verdad es que hasta el zoo nos ha parecido algo abandonado, con grandiosas y férreas jaulas que parecían estar hechas más para dinosaurios que para los pocos animales que cobijaban.

Los "grizzlies" u osos "marrones", pueden llegar a pesar los 500 Kg. y las garras que tienen no son ninguna tontería. Su enorme rapidez hace que si te encuentras con uno de ellos y considera que eres una presa, no tengas escapatoria. La única opción para sobrevivir es echarle mucha sangre fría, tumbarte en el suelo haciéndote el muerto y esperar un buen rato antes de levantarte porque suelen darse la vuelta para comprobar que no te mueves. Esta clase de temible oso te lo puedes encontrar en cualquier parte de "Alaska" y llegado el caso, nunca echar a correr que es lo que todos creemos que hay que hacer.

Después estaban los osos "negros", más pequeños y asustadizos que llegan hasta los 200 kg. y son los que suelen andar buscando comida, acercándose a casas y campins, como nos ocurrió hace unos días en "Chitina", que nos pasó uno por delante de la ventana de la autocaravana mientras escribía el diario de viaje. No obstante, si se cabrean también son peligrosos y puedes encontrarlo en la "mitad sur de Alaska".

Por último, los osos blancos que son los más grandes, están establecidos en la zona polar del norte de "Alaska" y son difíciles de ver.

Mañana entregaremos la autocaravana y haremos tiempo hasta la salida del avión por la noche, visitando algún parque que hemos dejado especialmente para el final, aunque después de lo de hoy, nos contentaremos con no aburrirnos demasiado.

Antes de entregar la autocaravana, nos hemos acercado con ella al aeropuerto para dejar el equipaje en una consigna. Como hasta la noche no nos sale el avión, es la mejor forma de andar tranquilos todo el día sin estar pendientes de nada.

Una vez entregado el vehículo en "Clippership" sin que nos hayan puesto ninguna pega, nos hanacercado al centro de "Anchorage" porque queríamos hacer un trail en bicicleta. Es común alquilar una bici para hacer la "Coastal trail" en donde se pueden llegar a ver diversos animales porque transcurre un gran tramo por el bosque de sus 37 Km. de longitud total.

Nosotros hemos tenido la suerte de ver una hembra de alce con una cría ya crecida comiendo tranquilamente al borde del camino, debiendo de estar muy acostumbradas a la presencia humana porque no se han inmutado, aunque motivos tenían al ver a la ¡¡¡ velociclista !!! Carmen. No es recomendable acercarse a ellos porque hasta los alces cuando se enfadan son muy peligrosos y su tamaño impone respeto. En nuestro caso, casi nos damos de bruces con ellas por lo que sin querer nos hemos acercado un poco aprovechando la ocasión y la tranquilidad que se respiraba, para fotografiarlas.

Después de pedalear durante 3 horas volvíamos a "Anchorage" para comer. Queríamos repetir el halibut como despedida de "Alaska", pero al ser domingo la mayoría de restaurantes estaban cerrados, terminando en un centro comercial de comida rápida, donde nos han dado uno bastante malo.

Por la tarde y coincidiendo con el mercado de artesanos que instalan los sábados y domingos, lo hemos visitado admirando principalmente las preciosas fotografías de osos y auroras boreales, pero sin comprar nada. Vamos llenos y con problemas de peso en las maletas.

Nos espera una noche rara para dormir, porque el vuelo sale a medianoche, dura 4 horas, perdemos 1 hora por cambio horario y tendremos que esperar 7 horas en "Seattle" hasta coger otro vuelo que nos llevará a "Chicago" en donde volvemos a perder otra hora. Así que toca armarse de paciencia.

Dia de aviones y de horas de espera en los aeropuertos. Aunque los vuelos han durado sólo 3,50 H. cada uno, las interminables horas de espera y los cambios horarios han hecho que nos llevara todo el día volver de "Alaska" a "Chicago", ciudad que nos encanta y en la que pasaremos 2 noches. Los vuelos realizados con "JetBlue" y después con "América Airlines" han respetados los horarios y todo ha ido con normalidad. Al atardecer llegábamos a "Chicago" dirigiéndonos en "Metro" hasta el hotel "Days Inn Chicago" que después de tantos días durmiendo en la autocaravana, cuando hemos entrado en la habitación nos ha parecido casi que estábamos en el "Hilton".

Un día en el que hemos recordado la anterior visita hace 2 años en invierno con un frío que penetraba hasta los huesos, debido a la humedad y en el que no pudimos ver "Chicago" desde el lago porque estaba helado y parecía una pista enorme de patinaje.

Hoy ha sido todo lo contrario, mucho calor e igual de humedad que entonces, lo que hace que en esta ciudad se tengan sensaciones térmicas extremas tanto de calor como de frío. Nos hemos lanzado a patear otra vez "Chicago", para mí la tercera vez y sigue sin cansarme, hasta el extremo de que pensamos que es la mejor ciudad de todo Estados Unidos. En "Chicago" la gente sale a pasear, a correr, a andar en bicicleta por la costa del lago, incluso algunos nadando y hoy había gente en las playas cercanas disfrutando en la arena.

También hemos hecho el paseo en barco que no pudimos hacer en invierno, disfrutando de un recorrido por el río en el que se concentran numerosos edificios arquitectónicos singulares y saliendo después al lago desde el que se tiene un bonito paisaje de rascacielos.

De nuevo hemos visitado la especie de restaurante donde solíamos comer y en el que te preparas las ensaladas a tu gusto y te cobran a peso. Un singular servicio que nos gusta tanto por el precio como por poder comer conforme a la cantidad y variedad que te apetece.

Mañana tomaremos el vuelo por la tarde hacia "Londres" pasando la noche en el avión, para después empalmar otro de "Easyjet" con destino a Bilbao. No obstante, por la mañana aún pasearemos un rato por este precioso "Chicago", que es como un escaparate de edificios de diseño, enclavado junto a un lago que le da esa amplitud tan preciada en las grandes ciudades.

Una visita de más de 2 meses a un país que tiene muchísimo que ofrecer en materia de naturaleza. La visita comenzó en la costa de Florida, subiendo en coche desde "Miami" hasta "Daytona", en donde nos dimos la vuelta porque llevábamos la misma trayectoria que la tormenta tropical "Andrea" y llovía con gran intensidad. "Miami Beach" ya con buen tiempo y siempre agradable por su arquitectura "Art Deco" nos agradó una vez más.

A partir de subimos hacia el norte por conocidas capitales de Estado, comenzando por "Philadelphia" de la que esperábamos más que su oferta de historia y "Firma de la Constitución". En tren fuimos trasladándonos a "Baltimore" que nos sorprendió mejorando nuestras expectativas, con un precioso puerto deportivo renovado y un acuario digno de las más altas calificaciones. Después fue "Washington", que también nos encantó puesto que su monumentalidad pensamos que ni "Viena" alcanza. "Nueva York" ya conocida y en su línea de siempre, ¡¡¡ atosigante !!!.

Continuamos en tren hasta "Boston" que nos defraudó bastante con un ambiente elitista y demasiado preocupado por ofrecer signos de una historia demasiado reciente. Alquilamos un coche para explorar la "Costa de Maine", que tantas veces había visto en películas y de la que lo único destacable son sus preciosos pueblos de pescadores a la nueva usanza, con barcos y veleros espectaculares.

Cambiamos de entorno volando a "Dallas" como nudo de conexión a "Seattle" y en el que estuvimos un par de días. La ciudad nos agradó con algunas zonas urbanas en las que se apreciaba una gran riqueza y en sus alrededores visitamos "Fort Worth", que representaba al viejo mundo tejano.

Otro vuelo nos situó en "Seattle", la famosa ciudad en la que tanto debe llover, pero que a nosotros en 18 días no lo hizo, luciendo además un sol espléndido. Allí en un coche visitamos el variado y maravilloso "Parque Nacional de Olympic" en donde pudimos ver desde preciosos paisajes montañosos, playas salvajes y hasta un bosque lluvioso. De allí nos dirigimos al "Monte Rainier" para después visitar "St. Helens" y tomar rumbo a "Montana" bordeando el río "Columbia" y entrando en el estado de "Oregon". Nuestro destino era el "Glacier Nat. Park" en el que pasamos 5 maravillosos días disfrutando de unos paisajes desbordantes de montañas, lagos y en donde vimos nuestros primeros osos. Paseos y caminatas como las del "Hidden Lake" e "Iceberg Lake" quedarán en nuestra memoria para mucho tiempo.

De "Seattle" nos dirigimos a nuestro objetivo principal del viaje, a la zona sur central de "Alaska", que es en donde se concentran los principales atractivos turísticos. Un destino mítico en el que el nombre por sí mismo te lleva a pensar en: nieve, osos y alces, todo ello aderezado con: glaciares, fiordos y el monte más alto de América del Norte, el "McKinley". Un destino que se visita en verano y en el que debes gastar mucho dinero en muy poco tiempo si quieres ver lo que realmente de importancia tiene. Las actividades recomendadas, si estás dispuesto a gastarte un buen dinero son: excursiones en barco a los glaciares de los fiordos con un precio razonable, sobrevolar en avioneta partiendo de "Talkeetna" el monte "McKinley" con un coste que se puede considerar importante ( alrededor de 250 € por persona y 1:15 H. de duración), y también ir desde "Homer" al "P. Nac. de Katmai" en avioneta para ver los osos "grizzlies" de precio pensamos abusivo, ( alrededor de 600 € por persona y una duración de 6 horas), el cual no hicimos. Aparte de estas actividades recomendaríamos un recorrido en autobús por el "P. Nac. Denali" en el que se puede ver mucha fauna pero de lejos, incluyendo "grizzlies" y de cerca el "McKinley" reflejado en pequeños lagos.

Otro de los aspectos importantes a tener en cuenta es, disponer del vehículo adecuado para lo que se quiera hacer, eligiendo entre una autocaravana o coche y dormir en hoteles. La poca oferta de hospedaje unido a la gran demanda concentrada en verano más al alto precio de los hoteles obliga a llevarlos reservados de antemano, restando flexibilidad a las visitas. Nosotros optamos por la autocaravana, si bien te limita el circular a rutas pavimentadas. En ambos casos, el coste de la visita a "Alaska" es muy alto.

La suerte con el tiempo, por otra parte, es el factor determinante para disfrutar de una zona que puede presentar diversas caras a causa de la lluvia o del sol. En nuestro caso, la estrella de la climatología la tuvimos de nuestro lado y los principales atractivos los pudimos disfrutar en su plenitud.

En todos los casos, la visita a "Alaska" debe estar bien programada porque no hay posibilidad de cambiar rutas, la poca infraestructura de carreteras te obliga a visitar lugares accesibles y no son muchos, por lo que el tiempo a pasar allí debe estar bien planificado. Nosotros consideramos que: el "Parque Nac. Denali", sobrevolar el McKinley y el crucero por glaciares que caen a los fiordos son las actividades que pueden compensar viajar hasta tan lejos, el resto de naturaleza se puede encontrar en otros lugares más cercanos y desde luego más baratos.